domingo, agosto 26, 2007

luz y sombra (final)

...Con un gesto soberano, la mujer paseo su mirada entre la gente, haciendolos callar. Finalmente poso su mirada sobre la mia, haciendome temblar. Esas facciones perfectas, esa actitud sensual y misteriosa, mesclada con sabiduria profana y un leve toque maternal, despertaron en mi lo que ninguna mujer habia despertado en mucho tiempo. La desee con locura, y tal fue la fuerza de mi pasion que senti temor de ella, de esa mujer menuda y atletica, de piel morena y mirada penetrante, que me sonreia como sabiendo que yo la deseaba, disfrutandolo. Senti miedo, senti panico de desearla asi, sin poder pensar en otra cosa, sin querer otra cosa mas que sumergirme en sus brazos y morir. Trate de mirar alrededor en busca de una salida, pero me vi atrapado por sus ojos, como una mosca en la telaraña. Fijamente perdido en su mirada, en esos ojos que parecian verdes y ambar, y mucho mas que no quise ver, me parecio que sus cabellos se encendian y que ella se elevaba, pareciendo envuelta en llamaradas portando armas en cada uno de sus multiples brazos...
Levanto la vista y miro hacia el frente, sonriendo y la gente se acomodo en silencio. Aturdido y perturbado, mire a mi alrededor buscando la salida, mientras maldecia por lo bajo las hierbas, el humo y los aromas dulzones del lugar. Rompiendo con elegancia el suntuoso silencio del lugar, ella comenzo a hablar en pali, y nuevamente me senti atrapado, esta vez por su sedosa voz. Mi compañera se inclino hacia mi y comenzo a traducir.

"La luz y la sombra son amantes. Los mas sublimes amantes. Nunca estamos seguros de donde se tocan. Eso significa que su roce es sutil, delicado, elegante y al mismo tiempo intenso.
Lo mas importante es que es intenso. Porque al tocarse, ambos se deshacen. El roce del uno con el otro los desintegra, los destruye como individuos. En ese punto ya no hay luz o sombra, ni luz ni sombra. Honestamente no sabriamos que decir sobre ese momento. Es misterio y magia. Intensidad.
¿Hay algo mas intenso que la muerte?
La vida se nos llena y cobra sentido cuando en nuestro camino divisamos la tumba.

Los amantes que comparten un lecho intenso tiene el mas divino de los goces.
¿Cuantas relaciones solo existen debido a la intensida del sexo?
Y por mucho que lo demas sea bueno, ¿que relacion dura si no hay buen sexo?

La luz y la sombra son amantes intensos, y sin embargo uds, en vuestras tierras y en vuestro tiempo, se han esforzado en creerlos enemigos. ¿Acaso hay una caricia mas suave y milagrosa que la que se hacen el dia y la noche al atardecer?
Hombres y mujeres somos como luz y sombra. Y como tales, debemos aprender a tocarnos de la manera adecuada. Porque es cierto que la sombra puede absorver a la luz, y asi mismo, la luz desintegrar la oscuridad. Pero aquello es un nefasto sinsentido, porque ¿ que seria de la luz sin una oscuridad que iluminar? ¿Que significado y sentido tendria su existencia? ¿Que seria de la oscuridad sin una luz que contener? ¿Como podria verse a si misma la oscuridad si no hubiera luz?

Algo tan simple y animal como el sexo, puede enseñarnos lo que la mas alta ciencia y filosofia no a podido; a vivir en armonia los unos con los otros. Pero para lograr aquello , primero debemos ser capacez de armonizar nuestra propia luz y sombra."

Lentamente las luces fueron bajando, hasta sumir la habitacion en una suave penumbra.
"Sean luz, sean sombra"
Senti la suave caricia de mi compañera, que herizo mi piel. Comense a escuchar cuerpos remorverse sobre las alfombras, murmullos de telas, suaves gemidos. Las manos de mi compañera comenzaron a recorrerme, hambrientas. Trate de observar a la mujer en el trono, pero la habitacion habia sido devorada por las sombras. Mi compañera estaba sobre mi, besando mi cuello, abriendo mi ropa, investigando mi cuerpo. Los murmullos y gemidos crecian como fuego en un pajar, aumentando hasta el peligroso punto de ebullicion. La oscuridad me traia sus ojos, me traia sus labios, su negra cabellera exuberante, su piel olivea, sus perfectas facciones. Los gemidos a mi alrededor parecian hacer eco de sus palabras. Luz y sombra desintegrandose con su roce, con el roce de mi compañera entregada a su fuego, alimentandose de mi piel. Las palabras de ella y sus ojos profundos como abismos, cambiantes y misteriosos, hipnotizantes, que me atraparon, que aun me atrapan, que aun me desintegran. La oscuridad y los gemidos, el remolino de calentura a mi alrededor, en mi interior, en mi mente y fuera de ella, y su voz susurrandome al oido las palabras terribles que me condenaban y me ataban a ella. Algo oscuro comenzo a sacudirse dentro mio, como si el oxido fuera cayendo de una maquina vieja que de pronto comienza a rugir, como una profunda ebullicion volcanica que, furiosa, arriesga la completa destruccion. Mi compañera rosaba su pecho desnudo contra el mio, me recorria y lamia hambrienta, y en mi mente era ella, no la gringa hippie que no se depilaba, no la chica-diosa que encontre a la entrada del hotel, sino la mujer del trono, la santa prostituta que me ato con su mirada, que me ato con su cabellera negra y su voz sedosa. Entonces senti otras manos sobre mi, muchas manos tocandome, algunas suaves, otras mas duras y grandes. Senti gemidos y respiraciones tocando mi piel, y senti pieles ajenas, tibias y sudorosas, todas mescladas en un solo aroma que me devoraba. Y aunque entendi lo que pasaba(entendi o quise entender), en mi mente era ella, solo ella, la diosa prostituta de muchos brazos, envolviendome con su cabello exuberante, lamiendome con sus cientos de manos y con su mirada verde-ambar mi piel y bajo de ella, alli en lo mas profundo, donde todas las cosas que soy se funden y son una sola, donde yo y todas las cosas son lo mismo. El roce de pieles suaves, duras, velludas, rubicundas, morenas, llenas de carne, tensas y duras, todas mojadas, todas latiendo al son de la voz de ella, Kali la destructora, que envolviendome con sus cientos de manos y su lengua y sus cabellos, me arrastraban a lo mas porfundo, a aquel abismo que habita dentro de nuestra mente, donde se funde la luz y la sombra y todo se desintegra. Temble ante la forma en que ella se posesionaba de todos esos cuerpos, de como ella tejia su tela solo para atraparme, solo para devorarme y llevarme a un lugar que parecia lleno de lujos y placeres, que sin embargo, me causaba panico y terror. Vi sus ojos en la respiracion, el sudor, las manos, la piel, el aroma a sexo y en lo mas profundo de mi mente, y temi fundirme y desintegrarme, temi mirarme al espejo y verla a ella, temi el placer y el lujo que da la muerte....
De un salto, tropezando con los cuerpos repartidos y entrelazado, desembarazandome de las manos que me aferraban y tiraban de mi a lo mas profundo, hui del lugar, hacia el alba, y deje la region para siempre, sin mirar atras...

2 comentarios:

jfhurtado dijo...

bueno y muy intenso!

tiomemo dijo...

notable y sensual